La terapia coadyuvante para el cáncer es un conjunto de intervenciones complementarias que se aplican junto con los tratamientos convencionales. Su objetivo es mejorar la eficacia del tratamiento y la calidad de vida del paciente. Es fundamental que estas terapias se administren bajo la supervisión del equipo médico principal para garantizar la seguridad y la coherencia con el plan general de tratamiento.